lunes, 13 de mayo de 2013

Para reírnos.


A veces una tiene que descansar y echarle a la mente algo que solo sirva para pasar el rato y, a ser posible, echar unas risas. Para esto hay muchos comics que leo una y otra vez – Mortadelo y Filemón son infalibles- pero también hay algunos libros que en días más o menos mustios consiguen arrancarme alguna que otra carcajada. Y como la primavera es algo traicionera y suele dejarnos un poco apáticos, para animarnos os dejo una lista de varias historias divertidas con las que disfrutar tirados en el sofá dejando de lado las cosas negativas. Si las acompañamos con una buena tableta de chocolate es probable que incluso nos sintamos en la gloria.
 
 

Marciano, vete a casa –Martians, go home- de Fredic Brown. Estamos en el año 1964 y el mundo, después de señales evidentes de escritores como H. G. Wells, debería estar preparado para una invasión alienígena. Sin embargo, no es así y la gente se ve de pronto asaltada por millones de  hombrecillos verdes que campan a sus anchas por todas partes. ¿Pero qué ocurre cuando estos seres de Marte son irritantes, molestos, caprichosos y solo quieren divertirse a costa de los terrestres? ¿Y si encima pueden “kiwmmarse”, es decir aparecerse en cualquier lado, para darte la lata cuando estás haciendo el amor, conduciendo o viendo un evento deportivo donde ellos quieren ser los protagonistas del juego? Pues que el mundo se convierte en un caos donde todo deja de funcionar, los manicomios se llenan de humanos y los marcianitos se mueren de la risa molestando al personal.
 
 

Tres ingleses en Alemania, de J.K. Jerome. Como su nombre indica es la historia de tres ingleses, un soltero y dos casados, que deciden alejarse de sus familias para pasar una temporada vacacional a solas. Escrita en 1900, su autor ya había tenido un gran éxito anteriormente con Tres ingleses en una barca y aquí repite a los protagonistas para situarlos por distintos lugares de Alemania. Tiene momentos desternillantes, así como una autocritica sarcástica acerca del típico inglés de la época. J.K. Jerome fue amigo de Rudyard Kipling, H.G. Wells y Arthur Conan Doyle, entre otros muchos escritores famosos de principios del siglo XX.

 
La caída del museo británico, de David Lodge. Irónica visión de un matrimonio católico que tiene tres hijos y seguramente está esperando el cuarto. Tan surrealista que no puedes dejar de reír.
 
 

Memorias de un amante sarnoso, de Groucho Marx. Ya desde que comienzas a leer el actor te advierte que esta no es una historia sobre sexo, que hay mil formas de vender un libro y que comprendería que algún lector se sintiese estafado. Y sigue diciendo: Descartada pues la cuestión sexual, veamos de que otras cuestiones podemos ocuparnos. No creo que acompañando a Groucho por las anécdotas de su vida -personal y profesional- y dejándote llevar por unas opiniones que no dejan indiferente a nadie, puedas sentirte estafado. Porque al final terminas pasándotelo tan bien que te da igual que el libro no tenga que ver con el sexo en el caso de que fuera eso lo que buscabas.
 
 
 

El inimitable Jeeves, de P.G. Wodehouse. La historia trata sobre un aristócrata inglés y su criado, Jeeves. Cada capítulo es independiente, aunque deja ver los mismos personajes, que van viviendo aventuras divertidas mientras Jeeves, el más inteligente de todos, consigue hacerse imprescindible a la vez que aumenta sus arcas solucionando problemas al resto del elenco. Divertida y fácil de leer. El autor escribió, aparte de muchas otras, algunas comedias más sobre este mayordomo tan especial. Ya las estoy buscando y espero que me resulten igual de amenas que esta.
 
 

Espero que os animéis a leer alguna para que se os dibuje una buena sonrisa en la cara.

 

6 comentarios:

  1. merchi, a mí también me gustan mucho mortadelo y filemón, desde pequeño. y he tenido la oportunidad de ver en persona a ibáñez en dos ocasiones. es mi ídolo, está siempre feliz, es más gracioso que sus personajes si cabe.
    está bien leer historias graciosas de vez en cuando. además las novelas de hoy en día a veces pecan de ser demasiado realistas y serias.
    besos, merchi!

    ResponderEliminar
  2. por cierto, muy chula tu nueva plantilla!! :)

    ResponderEliminar
  3. Me los apunto todos a ver si los encuentro (bueno, el del museo británico ya lo he leído, ¡genial!)
    Yo siempre he sido más de Zipi y Zape XDDD

    ResponderEliminar
  4. Chema, me he vestido de primavera, el verde es un color alegre y optimista y quiero que se me contagie un poco, jejeje...Me encantaría conocer a Ibáñez, qué suerte has tenido. Un besito.
    Geno, Zipi y Zape también me gusta mucho. Yo disfruto de todos, son geniales. Si encuentras el de los marcianos te vas a reír mucho, los demás son muy divertidos pero con el de los marcianitos me ha hartado de reír. Besitos.

    ResponderEliminar
  5. Me encanta la literatura británica y soy una gran fan de Wodehouse. Me apetece leer "Tres ingleses en Alemania".

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo me he alimentado practicamente de la literatura británica toda la vida, me gusta en muchas de sus facetas. Gracias por pasarte por aquí, Zambu, es un placer y un honor que me leas. Un beso.

      Eliminar